Me comenta que se van a Tánger unos días y me ha recomendado el hotel en el que se alojan siempre, La Tangerina.
He estado echando un vistazo a través de internet y me parece precioso.
Qué ganas de ir a una ciudad como Tánger....qué ganas de ir a Marruecos; tan cerca y nunca he puesto un pie en el país. Rubén si ha estado varias veces, de rallye con su padre.
Tánger fue una de las capitales del mundo y creo que, poco a poco, está volviendo a recuperar protagonismo: Barbara Hutton, Truman Capote, Paul Bowles (que llegó a Tánger por primera vez por consejo de Gertrude Stein, que había veraneado allí con Alibe B. Toklas en 1931), Tennessee Williams, Sebaaaastiaaaan; el matrimonio Saint Laurent-Bergé...Felipe González y su García Vaquero....en fin, que me llama la ciudad.
Me decía también Sofía que desde allí cogen un tren para ir de excursión a la vecina Assilah o a Marrakech cuando el monte Atlas está nevado ¿se puede ser más decadente en tus formas, más colonial? un mini grand tour marroquí. Adoro a la gente que es capaz de disfrutar de estas cosas....como ella misma se define, Sofía es una coleccionista de paisajes y una disfrutona de las pequeñas cosas.
Victoria nos trajo las latas de conserva de la Conserveira de Lisboa y ya probamos una de ellas para el almuerzo de ayer: bacalao con ajo. Exquisito. El bacalao parecía confitado y estaba en su punto de sal.
También ayer me llegó al trabajo nuestra nueva cocotte de Le Creuset, redonda, alta, de 26 cm y en color cereza. Una preciosidad. Ahora estoy nervioso porque no he decidido aún con qué estrenarla.